sábado, 25 de abril de 2009

Sensaciones de un viajero (por agencia)

Aquí os presento una imagen que representa algunos aspectos de la cotidianidad y realidad cairota que, como en otras muchas ciudades y países, desgraciadamente, seguimos viendo cada día. El contraste entre dos mundos enfrentados por el choque de las culturas se hace perceptible en cada instantánea, que sin buscarlo, las encuentras llenas de significados, de mensajes identificatorios de una realidad cruel. Mujeres son porque conocemos el problema, no porque veamos en ellas los rasgos propios de una dama. Los oscuros atuendos que recubren su cuerpo (excepto los ojos), las delatan. ¿Serán delincuentes? ¿Vendrán de un carnaval? Por desgracia, no es así. Muchos son los que han intentado luchar contra estas injusticias alzando su voz a través de sus libros u otros medios, pero no desde el poder, y quienes ahora lo hacen, pero desde el escondrijo más inhóspito del anonimato. Parece que el intervencionismo político en la religión, entre otra razones, hace cada vez más difícil el esperado paso, que utiliza el término “igualdad” como parte de su demagogia habitual.

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